Tratamientos
Dentales
Odontología Integral
«Entendemos la odontología integral como una asistencia dental única y personalizada para cada miembro de la familia.»
Trabajamos en todas las áreas de la odontología convencional y en muchas de sus especialidades: Implantología, Ortodoncia, Prótesis, Odontopediatría, Periodoncia, etc.
Nuestro objetivo final es la salud dental completa de nuestros pacientes.
Odontología conservadora
“Higiene Dental, el paso más importante para conseguir una correcta Salud Bucodental”
Los pilares de una correcta salud dental se basan en la odontología conservadora, no hay que olvidar que la prevención elimina la mayor parte de los problemas dentales más comunes. Su odontólogo de confianza le informará de todo para que usted juegue un papel activo en su correcta higiene bucodental.
Entre los tratamientos más usuales están: Revisiones · Limpieza general · Reparación de caries y empastes · Extracciones · Endodoncias · Prótesis removibles · Prótesis fijas: coronas y puentes
Odonotopediatría
“Es fundamental trasmitir confianza a los niños para que no sientan ningún miedo al dentista.”
La odontopediatría estudia los cuidados y reparaciones en la boca de niños y adolescentes, a cada edad le corresponden unos cuidados específicos. También será de máxima importancia llevar al niño al dentista desde temprana edad, esto hará que se acostumbre a los cuidados de su boca sin sentir desconfianza, al mismo tiempo que aprenderá todos los recursos para su correcta higiene bucal.
Implantologías
Un implante dental es una pequeña pieza de titanio, de material biocompatible que se colocan en los huesos maxilares, con el objetivo de sustituir una pieza dental que se haya perdido. Sobre este implante de titanio se coloca la corona de metal/porcelana o zirconio, lo que garantiza que sea muy duradera y que tenga una estética magnífica. Los últimos estudios realizados dan unas estadísticas de éxito superior al 94% en la colocación de implantes.
Es muy importante recalcar que ninguna persona rechaza los implantes dentales, lo que ocurre es que en un porcentaje muy bajo, el implante no se osteointegra del todo, existen distinas causas, si ello ocurriera no habrá inconveniente en estudiar como solucionarlo y colocar otro implante en el mismo lugar.
Los implantes dentales se sujetan al hueso por un proceso conocido como Osteointegración, mediante el cual el organismo establece una conexión directa entre el hueso y la superficie del implante. Una vez concluido el proceso de osteointegración el implante se encuentra íntimamente unido al hueso con la capacidad de realizar todas las funciones de un diente natural sano.
Es muy importante recalcar que ninguna persona rechaza los implantes dentales, lo que ocurre es que en un porcentaje muy bajo, el implante no se osteointegra del todo, existen distinas causas, si ello ocurriera no habrá inconveniente en estudiar como solucionarlo y colocar otro implante en el mismo lugar.
Prótesis
Con el transcurso del tiempo las personas podemos perder uno o varios dientes de nuestra boca, por distintas causas tales como fracturas, caries profundas que impidan hacer una endodoncia ó diferentes inconvenientes de salud dental. En esta tesitura, se crea la necesidad de sustituir las piezas perdidas para reestablecer la estética dental, las funciones masticatorias y el bienestar general del paciente.
Una prótesis dental es un sustituto artificial de los dientes naturales, que dependiendo de la cantidad dentaria a reponer, su posición, el estado del resto de los dientes, o del uso de implantes, será fabricada en un material u otro y podrá ser fija o removible.
A. Prótesis Removibles:
Es preferible no dormir con ella, ya que a largo plazo puede producir efectos nocivos sobre la mucosa oral. El paciente debe limpiarla después de cada comida. Hay tres tipos de prótesis removibles:
– Resina (o Acrílico) con base metálica: Conocidas como prótesis esqueléticas. Se usan cuando la pérdida dentaria es poca, y los dientes que quedan en boca están en buen estado. Tiene la ventaja de poseer un pequeño tamaño, por lo que suelen ser cómodas de usar.
– Resina (o Acrílico) completa: Estas prótesis son perfectas cuando existe una gran pérdida dentaria y ósea. Sustituirán todos los dientes de la arcada (prótesis completa) ó un amplio sector manteniendo algún diente en boca (prótesis parcial). La resina se adaptará a todo el contorno de su mucosa oral, facilitando la masticación y la armonía facial. El único elemento metálico en estas prótesis son los ganchos que irán sujetos a los dientes restantes (en caso de haberlos).
– Sobredentaduras: Son prótesis completas de acrílico como las mencionadas anteriormente, con la diferencia de que van ancladas o sujetas a 2 ó 4 implantes según sea superior o inferior. Estas prótesis abarcan una gran variedad de ventajas, ya que al tener varios puntos de sujeción disminuyen notablemente la movilidad, no es necesario el uso de pegamentos ni otros mecanismos de adhesión, y están fabricadas con una serie de componentes que las dota de una resistencia mayor que las prótesis completas convencionales. Estas prótesis siguen perteneciendo al grupo de “removibles”, el paciente debe limpiarlas tras las comidas y no deben permanecer en boca durante la noche.
B. Prótesis FIJAS:
Son aquellas prótesis que el paciente no debe retirar de su boca, completamente fijas a dientes naturales o a implantes, y que proporcionan una mayor estabilidad, estética, función y confort. Su tamaño es considerablemente más reducido y la limpieza de las mismas se realizará en boca, similar a su dentición natural.
– Puente sobre DIENTES:
Los puentes dentales se utilizan para reemplazar dientes ausentes y ocupan exactamente el mismo espacio que ocupaban los perdidos. Dichos dientes se sustituyen mediante coronas o fundas de cerámica unidas entre sí, cementadas directamente sobre el diente de delante y de atrás (dientes pilares).
– Puente sobre IMPLANTES:
Al igual que hemos comentado anteriormente, estos puentes sirven para reemplazar varios dientes perdidos cuando es imposible contar con dientes sanos delante y atrás que nos sirvan de pilares. Constaría de coronas ó fundas de cerámica unidas entre sí, atornilladas a dos implantes, uno delante y otro atrás del espacio a reponer.
– Prótesis fijas sobre IMPLANTES:
Sirve para reponer la totalidad de una arcada (no solo un sector como en los puentes sobre implantes) de manera fija sin poder ser retirada por el paciente. Al no tener ningún diente natural sano se carece de sujeción por lo que es necesario la colocación de implantes dentales.
Estas prótesis irán atornilladas a los implantes y únicamente serán desatornilladas por el especialista en sus revisiones anuales. Podrán ser de cerámica o de resina según las características del paciente y el número de implantes.
Hoy en día son muy frecuentes estas prótesis dentales, ya que le devuelven al paciente el bienestar perdido muchos años atrás. Destacan por su tamaño reducido y su resistencia, dotándonos de una solución estética, que recupera la expresividad y funcionalidad de la boca de nuestro pacientes.
Periodoncia
“Detectar, diagnosticar y tratar la enfermedad periodontal a tiempo es fundamental para evitar la pérdida progresiva e irreversible de nuestros dientes y los tejidos que los rodean”.
La enfermedad periodontal es aquella patología que afecta al periodonto, es decir, a los tejidos que rodean y sostienen al diente (hueso alveolar, cemento y ligamento periodontal) y son patologías infecciosas, causadas por bacterias. Podemos clasificar la enfermedad periodontal en dos fases:
Considerada como la fase más precoz de la enfermedad periodontal, afecta únicamente a la encía, produciendo un proceso inflamatorio reversible de la misma. El síntoma más frecuente es el sangrado espontáneo de las encías, o durante el cepillado dental, aunque es menos manifiesto en fumadores.
Si la gingivitis se mantiene a lo largo del tiempo y se unen además otros factores externos, comienza la fase de la enfermedad periodontal calificada como periodontitis (común, aunque incorrectamente llamada “piorrea”). Se produce, además de la inflamación de la encía, una destrucción progresiva de los tejidos del periodonto mencionados anteriormente, creando un espacio debajo de la encía denominado “bolsa periodontal”, en el que se acumularan mayor cantidad de bacterias, poniendo en peligro la supervivencia de los dientes.
Esta destrucción es, además, irreversible, y debe ser tratada con urgencia y revisada periódicamente cada 3-6 meses para su control absoluto.
Las consecuencias de no tratar la enfermedad periodontal puede ser doble:
– A nivel local (en la boca) produciría la pérdida de dientes, y con ello una afectación directa sobre la masticación, la estética y la funcionalidad de nuestra boca.
– A nivel general, se produciría una afectación sistémica, es decir, a nivel del resto del cuerpo. La presencia de gran cantidad de bacterias debajo de la encía hace que puedan pasar a la sangre y afectar a otros lugares del organismo, ocasionando enfermedades cardiovasculares, partos prematuros, descompensación de diabetes y otros.
Es muy importante tratar la enfermedad periodontal, pero sobretodo, PREVENIRLA. Debe acudir a sus revisiones periódicas anuales y mantener una correcta higiene bucal, complementando su limpieza diaria con hilo dental, cepillos interdentales y en casos concretos con colutorios antisépticos específicos recomendados por el especialista.
En su fase más precoz, es decir, en la gingivitis, deben limpiarse las bacterias o placa dental que se hayan acumulado mediante una limpieza dental convencional o tartrectomía. Este tratamiento podrá ser realizado por su odontólogo general o higienista dental. Los pacientes serán informados de las correctas técnicas de higiene tanto de dientes como de encías y su mantenimiento para prevenir un nuevo episodio de gingivitis. En su fase más avanzada o tardía, es decir, en la periodontitis el tratamiento se resumirá en dos fases. Una primera fase irá encaminada a la eliminación de las bacterias que residen en las llamadas bolsas periodontales, formadas a causa de la destrucción de los tejidos que sostienen a los dientes; esto se lleva a cabo mediante un tratamiento denominado “Raspado y alisado radicular” que consiste en limpiar las bacterias, placa y cálculo de las raíces de los dientes (puede acompañarse o no del uso de antibióticos).
La segunda fase del tratamiento irá encaminado a tratar aquellas periodontitis más agresivas, con una mayor pérdida ósea y de tejidos circundantes o que no hayan respondido en su totalidad al tratamiento de “Raspado y alisado radicular”. Esta es la denominada fase de “Cirugía periodontal” en la que en ciertos casos se puede aplicar de manera localizada la técnica de regeneración del hueso perdido.
Es muy importante que la enfermedad periodontal sea diagnosticada, tratada y vigilada por un especialista exclusivo de la materia. La fase de mantenimiento tras el tratamiento es esencial para una curación total y mantenida en el tiempo. Los controles oscilarán entre los 3, 6 y 9 meses, según cada caso en particular.
Periodoncia
A día de hoy es frecuente encontrarnos situaciones en las que el nervio dental o pulpa se encuentren afectado, bien por caries dentales ó traumatismos, y ello provoque dolor dental o infección progresiva de un diente (fístula ó flemón).
La endodoncia es el procedimiento por el que se elimina, desinfecta y retira la pulpa, sellando el canal del nervio con un material biocompatible llamado gutapercha que aísla al diente evitando la contaminación bacteriana.
En Clínica Dental Juncal contamos con un equipo altamente cualificado y una aparatología de última generación, que garantiza el éxito de nuestras endodoncias.
Generalmente se realizan en una o dos sesiones, dependiendo del diente o de la magnitud de la infección. Hay dientes con un único nervio (unirradiculares), dos nervios (birradiculares) ó 3-4 nervios (polirradiculares); en base a ello dependerá el tiempo de tratamiento.
El tratamiento de conductos es prácticamente indoloro, ya que se utilizan anestésicos locales muy eficaces y de duración prolongada. Una vez pasado el efecto del anestésico, puede aparecer cierta sintomatología leve, sobre todo con la masticación, debido a la inflamación postoperatoria de los tejidos que rodean al diente, que irán disminuyendo progresivamente hasta su completa desaparición.
No exactamente. El cuidado de un diente endodonciado es prácticamente igual que el cuidado de un diente natural sano, salvo que es recomendable colocar en el diente tratado una corona ó funda que lo aísle de posibles fracturas ó nuevas agresiones que puedan provocar su deterioro.
Hay situaciones en las que se imposibilita el tratamiento de conductos, tales como fracturas verticales, grandes caries que abarcan toda la corona dentaria, o cuando el soporte óseo del diente es insuficiente, provocando la movilidad del mismo. En estos casos el tratamiento de elección consistiría en la extracción dental.
Ortondoncia
¿Qué es la ortodoncia?
La edad adecuada para comenzar con el tratamiento varía según el tipo de problema y su gravedad. Por lo tanto, es aconsejable consultar al ortodoncista tan pronto como se descubra una anomalía en la masticación o en la forma de la dentadura. Aun así, recomendamos que, se detecte o no un problema, se lleve a los niños para revisión por el ortodoncista al menos a los 6 AÑOS de edad.
En absoluto. Gracias a la acción de estos aparatos es posible mejorar el estado de los dientes, encías y huesos maxilares. Lo que sucede es que hay aparatos que favorecen la retención y acumulación de alimentos, debiéndose extremar el cuidado en la limpieza de los dientes.
No. Durante los primeros días puede producirse alguna molestia o incomodidad, las cuales desaparecerán una vez creado el hábito. Si persistieran en el tiempo será importante la consulta con el ortodoncista.
Sí. Es importante una revisión general, en la que se descarten otras patologías orales como la gingivitis, periodontitis o caries dental. También deben solucionarse determinados hábitos tales como respiración bucal, interposición lingual o la succión del dedo pulgar.Todo ello debe ser eliminado antes de comenzar con el tratamiento de ortodoncia.
Diferentes tipos de ortodoncias:
Existen diversidad de aparatologías en el tratamiento de ortodoncia, desde la ortodoncia clásica con brackets metálicos hasta los mas novedosos alineadores dentales (ortodoncia invisible). El dentista estudiará su caso, y recomendara el tipo de aparatología que se ajuste mas a la boca del paciente.
Férulas
Las férulas dentales son un tipo de aparatología dental que según su tamaño y su forma serán utilizadas con un propósito u otro.
Las clasificamos en:
Son férulas muy parecidas a las férulas de retención de ortodoncia; la diferencia reside en que las férulas de blanqueamiento son más flexibles para que puedan albergar mayor cantidad de producto blanqueante.
Ocupa la totalidad de ambas arcadas. Su tamaño es reducido y su función es el mantenimiento de la posición correcta dentaria tras el tratamiento con ortodoncia.
Es un dispositivo adicional a cirugías de cierta envergadura con implantes. Nos indican previamente la guía de inserción y colocación de dichos implantes, de manera que la intervención se convierte en un procedimiento mucho más sencillo.
Tras el tratamiento de la enfermedad periodontal, puede existir cierta movilidad pasajera, que será reducida con la férula de periodoncia, manteniendo unidos los dientes de la arcada dentaria tratada.
Determinados deportes o ejercicios tales como rugby o boxeo exigen una protección complementaria de sus arcadas. En ello reside la función de los protectores bucales.
Llamamos bruxismo al hábito involuntario de apretar o rechinar los dientes. Este bruxismo puede aparecer por el día, por la noche o durante ambos periodos. La causa desencadenante suele residir en el estrés temporal o permanente de nuestros pacientes.
Las consecuencias pueden llegar a ser graves e irreversibles, provocando desgastes dentarios no controlados, problemas en la articulación mandibular, y en casos más graves la imposibilidad de apertura o cierre bucal.
Los síntomas consisten en dolor en la propia articulación, o dolores continuos de cabeza y cuello. Otro de los síntomas más referidos por los pacientes, suelen ser el chasquido al abrir o cerrar naturalmente la boca. La férula de descarga debe ser realizada una vez aliviado el dolor, a través del tratamiento con antiinflamatorios y ansiolíticos si el dolor lo precisara. Una vez llegados a este punto, realizamos la férula, cuyo tamaño es mayor que las férulas descritas anteriormente, con la finalidad de impedir el cierre total de la boca conllevando así a su relajación, tanto articular como dental o muscular.
La férula debe colocarse TODAS las noches sin excepción alguna. En casos más graves o de mayor patología, el paciente debe llevar la férula durante 24 horas durante el primer mes. El especialista irá regulando y modificando la férula según la respuesta del paciente.
Blanqueamiento dental
Tratamiento dental cuya finalidad es el blanqueamiento generalizado de todos los dientes. Según el color natural de los mismos conseguiremos una tonalidad u otra.
Para realizar el tratamiento de blanqueamiento es imprescindible que nuestra cavidad oral se encuentre limpia y libre de caries dentales. También es importante que el paciente no tenga sensibilidad dental acentuada en su día a día. Se realiza mediante férulas o dispositivos hechos a medida por el especialista. En el interior de dichas férulas se depositará un gel blanqueador que permanecerá en la boca del paciente durante 2-3 horas al día, aumentando progresivamente el número de horas al día según la sensibilidad del paciente. Previamente tomaremos un registro de su color actual mediante guías de color y fotografías; transcurridas tres semanas de tratamiento, se comprueba de nuevo el color dejando constancia de su nueva tonalidad.
Blanqueamiento interno
El Blanqueamiento interno es el tratamiento dental encargado de aclarar o blanquear un diente en concreto que se ha oscurecido con el paso del tiempo.
No es frecuente en el día a día, aunque puede ocurrir en pacientes con endodoncias antiguas que se han degradado en el tiempo.
El procedimiento se lleva a cabo en varias sesiones, colocando el producto blanqueador en el interior del propio diente. Este producto se irá renovando en las diferentes sesiones hasta conseguir el color deseado.